PERSONALMENTE
Desde pequeña he sentido una especial sensibilidad hacia las personas que sufren. ¡Mi sueño era irme de misionera a ayudar en África!
Más adelante me di cuenta de que no hace falta irse tan lejos para poder ayudar. Mis experiencias de vida me llevaron a sentir la necesidad de comprender de dónde surge el sufrimiento humano y por qué las personas actuamos de determinadas maneras.
Decidí estudiar Psicología, con la esperanza de poder aliviar el malestar que yo misma sentía en aquella etapa de mi vida.